Si estás pensando en cambiar tu puerta de entrada para ganar en seguridad, el mercado actual te ofrece la posibilidad de instalar una puerta blindada o acorazada, pero puede que aún no conozcas las diferencias fundamentales entre una y otra a la hora de eliminar riesgos.
Muchos clientes desconocen el uso de puertas acorazadas para instalaciones particulares, habitualmente asociadas a lugares de alto riesgo de robos y atracos, como en accesos a cajas de seguridad en bancos, depósitos de museos, armerías o sector de joyería, entre otros.
Pero, aunque ese haya sido su uso más habitual anteriormente, hoy en día y dado el nivel profesional de los amigos de lo ajeno, cada vez es más frecuente instalar este tipo de acceso protegido en viviendas particulares a la hora de elegir entre puerta blindada o acorazada.
Por eso en Tienda Cajas Fuertes, como especialistas en elementos de protección y seguridad, te contamos las diferencias más importantes entre una puerta blindada o acorazada a la hora de garantizar una verdadera seguridad.
Pero para entenderlo mejor, vamos a comenzar explicando la composición de una puerta de acceso blindada o acorazada, viendo las partes que realmente afectan a su seguridad
Partes de una puerta de acceso
En la composición de una puerta de acceso blindada o acorzada se pueden distinguir diferentes puntos esenciales que afectan a una mayor o menor seguridad.
Cercos y hojas
A la hora de fabricar hojas y cercos para puertas de entrada se pueden utilizar diferentes materiales para el armazón y revestimiento de las hojas, como madera, aglomerado con lámina de hierro o acero de entre 0,8 y 1,2 mm, o por el contrario elaborar la estructura en acero con omegas de refuerzo, en el que la lámina de madera tiene un carácter estético.
Las puertas de madera se instalan sobre marcos de madera en los que a su vez se alojan pernos y cierres, o en el caso de las puertas acorazadas, en marcos de acero de más de 1,5 mm de sección.
Entre las hojas y cercos de una puerta blindada o acorazada existe una diferencia sustancial en la resistencia de los materiales

Bisagras
Las bisagras que permiten abrir una puerta blindada o acorazada se instalan de una forma muy diferente en ambos casos, ya que en las primeras se atornillan directamente por un lado al cerco de madera, y por otro lado a su hoja.
La colocación de bisagras en puertas acorazadas se realiza mediante soldadura o atornillado a pletinas de metal con suficiente grosor para impedir la posibilidad de ser apalancadas.
Cerradura, bombillos y llaves
Elbumping es uno de los sistemas más habituales, limpios y silenciosos, para acceder al interior de casas y negocios, al utilizar llaves universales con las que en un solo golpe, consiguen variar la posición de los mecanismos de cierre de la puerta, y entrar sin riesgos muy rápidamente.
En este sentido, las empresas de cerrajería de puertas blindadas, han avanzado en el diseño de cerraduras que dificultan el uso de estas tácticas para garantizar una auténtica seguridad, utilizando diseños de cierre que impiden la entrada de llaves ajenas, y pestillos de gancho que dificultan la manipulación y el apalancamiento de la puerta exterior.
Una puerta aparentemente muy resistente con un fácil acceso a través de su bombillo exterior, puede ser manipulada y abierta en menos de treinta segundos
¿Qué es y cómo es una puerta blindada?
Las puertas blindadas son puertas de acceso realizadas con estructuras de madera, tanto para sus marcos como para sus hojas que se suelen reforzar con algunos elementos metálicos, habitualmente en hierro en algunos de sus puntos, o incluso adhiriendo una lámina de acero a su hoja durante su fabricación.
Los ladrones conocen a la perfección todos los puntos de refuerzo de las puertas blindadas, que además presentan muchas desventajas de seguridad frente a las puertas acorazadas, en cuanto a sus cerrojos y cerraduras, lo que hace que se pueda acceder al interior en un solo minuto.
Dado que hablamos de superficies fabricadas con estructuras mayoritariamente en materiales poco resistentes como los aglomerados de madera, es muy fácil eliminar el obstáculo que impide el paso, no solo para profesionales, sino incluso para aficionados.
La primera diferencia entre una puerta blindada o acorazada, es que la blindada no resiste el ataque con palanca, uno de los más frecuentes y fáciles sistemas utilizados por los ladrones.
¿En qué consiste y cómo es una puerta acorazada?
Una puerta de seguridad en acero, por el contrario, es una puerta fabricada con hoja en estructura en este material para garantizar la resistencia, y con una fina lámina de madera para el recubrimiento exterior que solo cumple en este caso una funcionalidad estética.
Este tipo de puertas de acero para entrada principal se instalan sobre fuertes cercos de ese mismo metal, que evitan su apertura por apalancamiento.
Pero además las puertas acorazadas disponen de cilindros que evitan la apertura con sistemas como taladro, rotura del bombillo por torsión, o utilización de una ganzúa.
Además, las puertas acorazadas cuentan con la particularidad añadida de evitar posibles copias de llaves por cualquier persona y en cualquier ferretería, dado que para obtener duplicados hay que disponer de la correspondiente tarjeta identificativa con su banda magnética.
Algunas puertas de seguridad para casa o negocio, cuentan también con sistemas de defensa activa que actúa con un sistema de bloqueo frente a cualquier intento de manipulación extraña.
Como puedes ver hasta ahora, parece que existe una gran diferencia de seguridad entre una puerta blindada o acorazada, pero vamos a ver su catalogación según la normativa UNE-85160, que clasifica este tipo de puertas de seguridad en nuestro país.
Categorías y grados de seguridad a la hora de adquirir una puerta blindada o acorazada
Para simplificar la elección a la hora de instalar una puerta blindada o acorazada, puedes fijarte en la clasificación oficial por su grado de seguridad certificado, teniendo en cuenta que estos se encuentran en una escala de 1 a 5 en función de la protección que ofrecen, siendo uno la inferior, y 5 la más alta.
La mayoría de las puertas blindadas se encuentran entre las clases de seguridad 1 y 2, por lo que son muy fácilmente vulnerables con los sistemas habituales de asalto básico.
Así que, si realmente quieres que tu nueva puerta de exterior cumpla con su cometido a la hora de garantizar la seguridad y protección de tu hogar o comercio, debes fijarte en su catalogación eligiendo una puerta blindada o acorazada de clase 3, 4 o 5, con sello de garantía de cumplimiento de la norma UNE EN 1627:2011.
En cuánto a que puerta en lugares que requieren una protección especial, directamente hay que elegir una puerta de seguridad de clase 5, que es la que cuentan con las mayores características de protección en este momento.
Y ahora que ya conoces las diferencias a la hora de instalar una puerta blindada o acorazada, echa un vistazo a nuestro catalogo para ver todas nuestras oferta, y contacta con nosotros para conseguir una instalación más profesional cómoda, rápida y segura.